La lana es un aislante natural increíblemente efectivo debido a su estructura única de fibra energia, que atrapa a millones de pequeños bolsillos de aire. Estos bolsillos de aire reducen la transferencia de calor a través de la conducción, la convección y la radiación. Cuando se usa como un revestimiento de aislamiento en cajas de cadenas frías, la lana ayuda a mantener temperaturas internas consistentes, protegiendo productos sensibles a la temperatura como alimentos, productos farmacéuticos y vacunas durante el tránsito, incluso en entornos externas extremos.
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2025-05-27

